lunes, 29 de noviembre de 2010

POR UN MOMENTO... (sonreí)

Dicen que no hay que buscar lo que no es para ti, que hay que saber ser paciente y tener el intelecto para disfrutar lo que estamos viviendo. Porque cada etapa de nuestra vida es indudablemente irrepetible, el tiempo no regresa y cada segundo vivido forma parte de nosotros, de quienes somos y de las decisiones que tomaremos en un futuro, basándonos en experiencias anteriores. Pero sin importar cuanto hayamos vivido, cuanta información contenga nuestro cerebro, siempre habrá temor a equivocarnos.

El tiempo jamás se detiene, si lo piensas es aterrador, desperdiciarlo… Cada noche de antro, de efectos bajo los influjos de algunos dulces, de besos robados en medio de un derrumbe de beats, de risas con los amigos, de caminar las calles de la ciudad cuando el sol está saliendo y el viento es muy frío, atrapado en el tráfico, en clase de apreciación artística o cuando esos momentos súper especiales llegan de la nada.

¿Cuánto tiempo podemos besar?

Ya era muy tarde, la noche ya estaba sobre toda la ciudad y parece que el tráfico no tiene un descanso dominical. Y como muchas otras veces, me sentí profundamente desilusionado porque al parecer ser gay, en la ciudad de México en domingo no está cool. Y no es que sea mamón, pero como me dijo alguna vez Gus, “por lo menos tuvieran personalidad, que tuvieran ALGO, pero no tienen ninguna gracia”

Entonces sentí su mano sobre mi piel…Y no sé, está muy enviciada esa sensación. Besar unos labios por primera vez, no es nada fácil. Te arriesgas a un mal aliento, a que te muerdan, que sean muy bruscos o que tú ritmo y su ritmo no se adapten a un nuevo ritmo. Pero cuando tienes, la fortuna de trascender eso, comienza una experiencia única.
Porque el besar, el buen besar, lo describiría como bailar, no es sólo mi ritmo, hay que conseguir adaptarse y aun así lograr sorprender con algún paso “nuevo”, las manos recorrieron todo mi cuerpo y al parecer el reír en medio del faje, está muy cool ser libre de moverte y de marcar nuevas formas, para que haya variedad no?

Magia. La noche me sonrío cuando, al salir a la calle el clima estaba delicioso, me agarro del cuello y voltio mi cabeza para besarme en medio de la calle WOW, abrasar o besar y caminar? O caminar con las manos agarradas y detenerte a besarlo… Por favor, por favor dime que habrá otra vez, para poder besarnos hasta que los labios se me sequen, poder tomarlo de la mano y que la gente piense que somos bf´s . Lo maravilloso de todo esto no es que me halla ligado a un niño tan guapo, ni de lo bien que besaba o de las cosas lindas que decía, lo realmente increible fué como me hizo sentir, Liz Gillbert por fin pude sonreír con la mente y el higado.

Un deseo… Inmenso.


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