viernes, 6 de abril de 2018

2018

El año pasado estaba sentado en la sala de Jos y le contaba sobre esa ansiedad que sentía de cumplir 30 años y no tener un trabajo que me haga sentir orgulloso, ni de tener un novio que ame... Jos se limito a mirarme a los ojos y decirme "Estas loco, eres muy joven aun". 

Se me acabaron los 20s y si recapitulo sobre ellos cometí grandes, GRANDES, ENORMES errores. Use drogas de manera inconsciente que pudieron costarme la vida, no tomaba nada en serio, engañaba a mis novios, no valoraba el trabajo, era muy egoísta, tan superficial, tan estúpido y con tantas ganas de vivir.

Me costo un par de años dejar de pelear con la realidad, no encontré las respuestas que busco (¿buscaba?), aprendí que no todo merece una explicación lógica solo aprendes a aceptar y seguir a delante. Hace un par de semanas lloraba ebrio en el hombro de alguien a lado del MUNAL porque por primera vez dije en voz alta que extraño a Diego y que me siento profundamente culpable por no darle el suficiente amor a Raziel. 

Cuando pienso en Jorge creo entender todo el esmero que puso en reparar algo que aun no se bien que es... Crecer es saber que estas roto y amar tus cicatrices. La vida pasa tan rápido, justo hoy vi en Twitter que Just Dance cumple 10 años (like... really?) Recuerdo perfectamente los pasillos de la universidad, Diego y yo hablando de estupideces, recuerdo estar obsesionado con la estética ochentera y los hombres circuiteros. Recuerdo mi hambre por tener un novio, por ir a Londres, por dejar la escuela y hacer crecer mis músculos. 

¿Me falle? 

Mmmmm no lo se. Hasta hace unas semanas estaba intentando ser un adulto que acepta su trabajo con todas esas cosas que los adultos toleran pero pocas veces externan, estaba intentando saber que quería Germán de mi. 

Y como por arte de magia un día recibí una llamada y creo que nunca imagine lo feliz que me haría saber que alguien me quiere en su equipo mayormente por mi "sensibilidad". Una tarde mientras veíamos la TV en mi casa Germán me pregunto si quería ser su novio...  Un día desperté y me di cuenta que pude dormir sin sentir ansiedad, o despertarme en la madrugada, o llorar hasta quedarme dormido por cosas que no puedo cambiar. 

Los pies no me dolían más. Una parte de mi esta aterrada, por que ese miedo constante de sabotaje vive dentro de mi pero por ahora soy el más feliz cuando Germán viene y lo cuido mientras esta enfermo, me gusta sentarme solo a comer una hamburguesa de 79 pesos, me gusta que mi familia se reúna para celebrarme un año mas de vida. Me gusta cuando mi familia acepta a Germán y me quedo dormido en su pecho mientras todos vemos la tele, hay cosas que nunca me van a dejar de doler, pero al mismo tiempo hacen que la vida brille más cuando es el momento. 

No se hasta donde llegue con Germán, pero cuando me dice "amor" o me toma de la mano en la calle no existe nada más en el mundo. 

No se que me deparen la siguiente década pero si mañana me muero quiero asegurarme de que di todo el amor que pude.