lunes, 15 de julio de 2019

El sexo en una madrugada de julio.

Es curioso como la comunidad gay usa el sexo como medio para pertenecer pero lo único que hace es alejarnos más y más, hasta terminar aislados. 

En las primeras horas de la madrugada del domingo, Fabio estaba besándome apasionadamente en su cama, el olor de nuestro sudor mezclado es fuerte, somos hombres jóvenes y atléticos. Según yo estaba muy consiente de no estar enamorado de Fabio, no aún. Pero después de que se vino y siguió besándome y abrazándome pude sentir lo cálido que hay en él. 

Regularmente cuando estamos acostados, él se queja de que no dejo que me abrace mientras dormimos, últimamente siempre estoy en su cama ebrio y desnudo... es extraño pensar como las cosas suceden, una tras otra y te lleva a situaciones que nunca hubieses podido controlar. 

Supe que no lo podría controlar más cuando en la mañana estaba acostado debajo de mi penetrándome y solo podía pensar en lo guapo que es, esos labios, su nariz, lo grueso de sus brazos y lo fuerte que es...

... 

Lo fuerte que es, me río mucho cuando estamos juntos y las cosas empiezan a fluir de manera orgánica, empezamos hacer planes para el futuro inmediato y hemos cedido uno con el otro. Me abraza cuando lloro en el cine, se levanta hacer el desayuno el domingo en la mañana, me da el control de la tv, puedo sentir su calor cuando descanso la cabeza en su pecho.


Con el paso del tiempo he aprendido a ser responsable con los sentimientos de otras personas. Valoro mucho que me de la confianza de llevarme a su casa y que me trate como su novio, que me de la mano en la calle y que me deje estar agarrándole la verga todo el tiempo. 

  


No hay comentarios:

Publicar un comentario